QUERIDO
MILITAR, QUERIDO HÉROE
¿Qué sería de un mundo descontrolado, lleno de sangre, lleno de
conflictos…? Es algo que muchas veces me pregunto, y aunque en cierto grado
ocurra, actualmente es algo que poco a poco va acabando. En muchos países
tenemos la suerte de vivir con una cierta paz y estabilidad, y lamentablemente
algo que olvidamos siempre, es que todo eso es gracias a los militares, es por
eso, que en esta carta quiero dar las gracias por todo lo que hacéis.
En estos tiempos de incertidumbre por la guerra de Ucrania, el miedo nos invade a muchos que pensamos que podría desenlazarse en algo peor de lo que ya es. Querido militar, soy una persona que vive con constante miedo, de vez en cuando siento escalofríos nada más de pensar qué será de esta guerra, pero hay algo que siempre me tranquiliza, sé, querido militar, que, si algo sucediese, allí estaréis para defendernos dispuestos a sacrificar vuestras vidas por salvar la de muchos otros. Una vez, escuché que una vida salva la de miles, y así es. Querido militar, tan solo tú con tu valentía proteges a miles de personas quienes sufren de guerras o carecen de seguridad en su país.
Cada día me siento más segura de que para conseguir la estabilidad que tenemos, se habrán perdido muchas vidas de por medio, vidas que con su coraje y sacrificio han hecho que lleguemos a ser el mundo que somos actualmente. Y sé, querido militar, que, siendo una simple ciudadana y a tan poca edad, no puedo hacer ni de lejos lo que vosotros hacéis por el mundo, pero qué menos que agradecer vuestra maravillosa y gran labor. Como simple ciudadana prometo hacer todo lo posible para que esa paz y seguridad se sigan manteniendo y se sigan expandiendo. Por otro lado, partir de vuestro país para ejercer vuestra labor, conlleva alejarse de la familia y seres queridos durante un largo tiempo. Ese sacrificio que hacéis por el mundo es algo increíble y digno de valorar.
Como española me enorgullece
saber que hay militares repartidos por el mundo que en su costado llevan
grabado la bandera roja y gualda representando a este país en el que tan
agradecida estoy de vivir. Me apasiona cómo un simple militar puede hacer tanto
por el mundo. Me fascina la manera en la que convertís maldad en bondad, miedo
en seguridad y conflictos en paz. Y me pregunto ¿qué te hizo querer ser aquella
persona que asegura el mundo día a día? ¿qué te hizo hacer que quisieras
derramar tu sangre para que así no se derramen la de otros? ¿qué te hizo querer
convertirte en un héroe para muchos? O, mejor dicho, ¿qué te hizo querer ser
militar? ¿Y qué es ser militar?, ser militar es luchar por los tuyos, ser
militar es ese compromiso que tienes con el mundo para protegerlo, ser militar
es transmitir seguridad en el miedo, ser militar es enseñar esa paz que debe
expandirse globalmente. En resumen, ser militar, aparte de ser una gran labor,
también es ser una gran persona. No hay suficientes palabras para expresar la
admiración que os tengo, porque para mí sois un ejemplo que seguir. Quiero
seguir esa vocación que tenéis, quiero seguir ese camino para construir un
mundo mejor y quiero seguir el sacrificio que hacéis en honor a la paz y la
seguridad. Querido militar, o, mejor dicho, querido héroe, quiero seguir tus
pasos. Gracias por todo lo hecho, lo que hacéis y lo que queda por hacer.
Miriam Serrano
Sarmiento
Colegio María Auxiliadora Salesianas (Écija)-
4º ESO
------------------
(De los Salesianos tenía que ser)
Wonderful Life
Katie Melua
https://youtu.be/abGe6uM9Ias?si=BgD-sjdIpzr3uxwG
Querida Mirian, a pesar de tu corta edad, tus sentimientos demuestran el gran corazón que tienes al valorar al Militar por su labor, y es de agradecer; pero LA SATISFACCIÓN DEL DEBER CUMPLIDO de todo miembro de las Fuerzas Armadas Españolas, hace evidente el verso de Calderón de la Barca sobre el ejercicio de la Milicia:
ResponderEliminar“Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.
Aquí, en fin, la cortesía,
el buen trato, la verdad,
la fineza, la lealtad,
el honor, la bizarría;
el crédito, la opinión,
la constancia, la paciencia,
la humildad y la obediencia,
fama, honor y vida son,
caudal de pobres soldados;
que en buena o mala fortuna,
la milicia no es más que una
religión de hombres honrados.”